Requisitos para ser joven ganadero
La ganadería es una actividad económica que consiste en la cría y el cuidado de animales para su aprovechamiento comercial, ya sea por su carne, su leche, su lana o sus pieles. La ganadería es una profesión que requiere de vocación, dedicación y conocimientos técnicos, pero también de una serie de requisitos legales y administrativos que hay que cumplir para ejercerla.
En este artículo te explicamos cuáles son los requisitos para ser joven ganadero, es decir, para incorporarte a la actividad ganadera siendo menor de 40 años. También te informamos sobre las ayudas y subvenciones que existen para facilitar el acceso de los jóvenes al sector ganadero y fomentar el relevo generacional.
Requisitos generales para ser ganadero
Para ser ganadero, independientemente de la edad, hay que cumplir una serie de requisitos generales que son los siguientes:
- Estar dado de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) de la Seguridad Social y en el censo de empresarios, profesionales y retenedores de la Agencia Tributaria.
- Estar inscrito en el Registro General de Explotaciones Ganaderas (REGA) del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), donde se identifica la explotación ganadera con un código único y se especifica el tipo y número de animales que se crían.
- Cumplir con las normas sanitarias, medioambientales y de bienestar animal que regulan la actividad ganadera, así como con las obligaciones de identificación, registro y movimiento de los animales.
- Disponer de las instalaciones, infraestructuras y equipamientos adecuados para el alojamiento, alimentación, manejo y cuidado de los animales, así como para el almacenamiento y gestión de los residuos generados por la actividad.
- Contar con la formación y capacitación necesarias para el desarrollo de la actividad ganadera, así como con los conocimientos sobre la normativa aplicable al sector.
Requisitos específicos para ser joven ganadero
Además de los requisitos generales para ser ganadero, los jóvenes que quieran incorporarse a la actividad ganadera deben cumplir unos requisitos específicos que les permitan acceder a las ayudas y subvenciones destinadas a facilitar su instalación. Estos requisitos son los siguientes:
- Ser menor de 40 años en el momento de solicitar la ayuda a la primera instalación.
- Instalarse por primera vez en una explotación ganadera como titular o cotitular de la misma, o haberse instalado en los cinco años anteriores a la solicitud de la ayuda.
- Cumplir con el concepto de agricultor activo y agricultor a título principal (ATP), es decir, dedicarse a la actividad agraria como actividad principal y obtener al menos el 50% de sus ingresos totales de la misma.
- Presentar un plan empresarial viable técnica y económicamente que contemple las inversiones y mejoras previstas en la explotación durante un período mínimo de cinco años.
- Disponer del nivel suficiente de capacitación profesional agraria o comprometerse a adquirirla en un plazo máximo de tres años desde la concesión de la ayuda.
Ayudas y subvenciones para jóvenes ganaderos
Los jóvenes ganaderos pueden beneficiarse de dos tipos principales de ayudas y subvenciones: las ayudas a la primera instalación y las ayudas directas de la Política Agraria Común (PAC).
Ayudas a la primera instalación
Las ayudas a la primera instalación son unas subvenciones que se conceden a los jóvenes que se incorporan por primera vez a una explotación agraria como titulares o cotitulares. Estas ayudas tienen como objetivo facilitar el acceso a la tierra, a las infraestructuras y al capital necesario para iniciar o modernizar la actividad agraria.
Las ayudas a la primera instalación se enmarcan dentro del Programa Nacional de Desarrollo Rural 2014-2020 y se gestionan por las comunidades autónomas, que establecen sus propias convocatorias, requisitos y cuantías. En general, las ayudas consisten en una prima única por instalación y/o una subvención para la realización de inversiones en la explotación.
La cuantía de la prima única por instalación puede variar entre 20.000 y 70.000 euros, según la comunidad autónoma, el tipo de explotación y el plan empresarial presentado. La cuantía de la subvención para inversiones puede cubrir hasta el 90% de los gastos subvencionables, con un límite máximo que puede oscilar entre 100.000 y 200.000 euros.
Para solicitar estas ayudas hay que presentar una solicitud en el plazo y forma establecidos por cada comunidad autónoma, acompañada de la documentación requerida, que incluye el plan empresarial y el certificado de capacitación profesional agraria o el compromiso de adquirirla.
Ayudas directas de la PAC
Las ayudas directas de la PAC son unos pagos que se conceden a los agricultores y ganaderos que cumplen con una serie de requisitos y obligaciones relacionados con la actividad agraria, el medio ambiente y el bienestar animal. Estas ayudas tienen como objetivo garantizar una renta mínima a los agricultores y ganaderos y contribuir al mantenimiento del tejido rural.
Las ayudas directas de la PAC se componen de varios regímenes de pago, entre los que destaca el régimen de pago básico, que se basa en la asignación de unos derechos de pago a los agricultores y ganaderos en función de las hectáreas admisibles que poseen o arriendan.
Los jóvenes ganaderos pueden acceder a los derechos de pago básico a través de la Reserva Nacional, siempre que cumplan con los siguientes requisitos:
- Ser menor de 40 años en el momento de solicitar el acceso a la Reserva Nacional.
- Disponer de hectáreas admisibles en el momento de la solicitud.
- Disponer de un expediente favorable de concesión de la ayuda a la primera instalación en el ámbito de un Programa de Desarrollo Rural.
- Instalarse por primera vez en una explotación agraria como responsable de la misma, o haberse instalado en los cinco años anteriores a la primera presentación de una solicitud al amparo del régimen de pago básico.
Además, los jóvenes ganaderos que acceden al régimen de pago básico tienen derecho a recibir un pago complementario al joven agricultor durante un período máximo de cinco años desde su instalación. Este pago complementario consiste en un importe adicional al valor medio de los derechos de pago básico que se asignan al joven agricultor. Este importe puede variar entre el 25% y el 50% según la comunidad autónoma.
Para solicitar estas ayudas hay que presentar una solicitud única en el plazo y forma establecidos por cada comunidad autónoma, acompañada de la documentación requerida, que incluye el certificado de concesión de la ayuda a la primera instalación y el certificado de asignación o solicitud de derechos de pago básico.
Ser joven ganadero es una opción profesional que implica una serie de requisitos legales, administrativos y formativos que hay que cumplir para ejercer la actividad ganadera. Sin embargo, también existen unas ayudas y subvenciones que facilitan la incorporación y el desarrollo de los jóvenes en el sector ganadero, así como su acceso a una renta digna.