Mercado Tradicional de Cervo
Mercado Tradicional de Cervo
El término municipal de Cervo está situado en las denominadas Rías Altas, al norte de la provincia de Lugo. El municipio, formado por seis parroquias, está bañado por el Mar Cantábrico. Por esto, es necesario destacar a localidad de San Ciprián (llamada Península de la Paz), rodeada de finos y blancos arenales, como las playas del Torno,Cubelas y A Caosa. Es digno destacar su puerto pesquero, que en los siglos XIV y XV construía carabelas y alimentaba una fábrica de salazón, de la cual aún podemos contemplar sus restos (conocidos como Castillo Marino). En la parte superior de la zona recreativa de esta localidade, la Atalaya, preside el Faro que vigila en el horizonte las míticas Islas de los Farallóns, cuna de la lenyenda de A Maruxaina (su historia es representada anualmente en una fiesta tipicamente popular). Los paseos empedrados bordean sus exquisitos arenales dándole a la villa un aire tradicional mezclado, al mismo tiempo, con modernidad.
Hace falta, también, destacar el arenal de Rueta (Praia das Areas Gordas) situado en la parroquia de Cervo.
Cervo, capitalidad del municipio, está presidido por la Casa do Concello, construcción reciente aunque realizada acorde con el resto de construcciones, entre las que destaca el Casco Antiguo. Entre los múltiples actos que se realizan en la restaurada Praza do Souto destacan el Mercado Tradicional y la ya consolidada Queimada Popular, que congrega a miles de personas.
Una de las visitas obligadas de todo aquel que visite nuestro término municipal es el paseo por el Parque Natural de Sargadelos, sito como su propio nombre indica en dicha parroquia. Desde Cervo se puede acceder a Sargadelos mediante un placentero paseo por el Camino Real bordeando el Río Xunco y contemplando diversas cascadas y molinos de auga. Una vez llegado a las inmediaciones del Parque Natural de Sargadelos, los sugestivos paisajes invaden la vista del tranquilo verdor, destacando el Conjunto Histórico Patrimonial, con los restos de las Antiguas Fundiciones y Fábricas de Loza, fundadas por Antonio Raimundo Ibáñez, Marqués de Sargadelos, en el siglo XVIII. En este enclave natural se puede caminar por el Paseo dos Namorados que termina en una bonita cascada. Así mismo, se puede contemplar en sus alrededores, frondosos bosques salpicados de casas rurales, como la Casa da Administración o el Pazo do Marqués de Sargadelos, que definen su paisaje como rural y señorial.